09/12/20169 de Diciembre de 2016

A nuestra consulta de psicología de Ciudad Real se acercan muchos padres preocupados por sus hijos. Hay muchos problemas psicológicos que pueden afectarnos en nuestra más tierna infancia, pero sin duda los más comunes son las parasomnias, más popularmente conocidas como pesadillas, sonambulismo o terrores nocturnos. Son trastornos que afectan prácticamente a todos los niños en algún momento de sus cortas vidas. Estos desórdenes del sueño suelen desaparecer con el tiempo en la mayoría de los casos. Sin embargo, es importante acudir al especialista, porque dormir mal, puede afectar a la salud del pequeño.

Miedo a la oscuridad, obsesión porque hay un monstruo en el cuarto o negarse a dormir solos son problemas que quitan el sueño a muchos padres que vienen con sus niños a la consulta de psicología en Ciudad Real. Veamos uno a uno los trastornos del sueño más comunes que engloban las parasomnias.

Terrores nocturnos: se confunden con las pesadillas, pero no son lo mismo. Los terrores nocturnos se producen mientras el niño está dormido. Puede tener los ojos abiertos y parecer que está despierto, pero en realidad el pequeño aún duerme. Este dato aterroriza a muchos padres. Suelen afectar a niños a partir de los 3 años de edad. Tienen lugar en la transición del sueño profundo al sueño ligero. Es decir, el niño está semi despierto, pero en una fase de sueño profundo. Son frecuentes cuando el niño está enfermo o estresado.

Sonambulismo: el niño parece despierto, e incluso puede hablar y realizar actividades, pero en realidad está dormido.  Se desconoce la causa, pero puede deberse a la inmadurez del sistema nervioso central.

Pesadillas: en este caso el niño sí se despierta y recuerda lo soñado.

En la consulta Mar Milla Sánchez Psicóloga aconsejamos a los padres que establezcan rutinas de sueño y procuren que sus hijos vayan relajados a la cama.